Habitaciones
Las habitaciones tienen techos altos y detalles de época que proporcionan una sensación de grandeza y espacio. Cada una cuenta con un diseño tradicional, con gruesas cortinas y telas de colores cálidos y hermosos suelos de madera pulida, mientras que los muebles y los cuadros de cada habitación son clásicos y a la par elegantes. Disponen de baño propio, de diseño sencillo en color blanco y que están en un estado regular.
Restaurante
En la primera planta, con vistas a la calle, hay una enorme sala palaciega con un bar en un extremo y acogedoras mesas circulares ocupando el espacio restante. En esta sala se sirve el desayuno, mientras que el resto del día se puede tomar una bebida relajante, empapándose del ambiente, o mirando por los elegantes ventanales. Se ha añadido recientemente un restaurante a la carta de servicio completo junto a la recepción que sirve una mezcla de cocina sueca e internacional.
Exterior
El hotel es una residencia urbana restaurada de mediados del siglo XIX que aún conserva la mayor parte de las características clásicas de la época, con sus altos ventanales y original ornamentación en piedra.
Sala
El vestíbulo se ha renovado recientemente y ahora está decorada con una mezcla de estilos tradicional y contemporáneo. Hay grandes sofás de cuero en la zona de asientos de recepción y el restaurante está al lado. Los toques e influencias personales que el propietario ha aportado son evidentes en la atención al detalle de la decoración.