Habitaciones
Todas las 73 habitaciones espaciosas con aire acondicionado están muy bien equipadas de todas las facilidades incluyendo ducha y/o bañera, WC, secador de pelo, televisión por satélite / canales pagados, acceso a Internet inalámbrico de alta velocidad gratuito, teléfono IDD, caja fuerte personal, cafetera y mini-bar. Servicio de habitación está disponible durante horario limitado. ¿Es usted un músico aficionado? Especialmente para usted tenemos una habitación con piano. En el Hotel Meteor Plaza hay 5 suites y 10 habitaciones triples que le darán una sensación de ambiente espacioso, cómodo y funcional. Además del equipamiento de habitación estándar, encontrará un sitio acogedor con una lámpara para leer y prensa para pantalones. Algunas de las habitaciones vienen equipadas de una bañera de hidromasajes o combinación de la bañera y ducha. Algunos de nuestros apartamentos vienen equipados de un televisor especial de pantalla ancha. Las habitaciones triples están equipadas de tres camas separadas o una cama doble con sofá-cama.
Restaurante
En la planta baja del hotel se encuentra un bar moderno, un restaurante acogedor y una terraza donde los huéspedes pueden disfrutar tomando una copa durante los meses de verano. La cena se suele servir en una romántica bodega de vino, que servía a su propósito ya en el siglo XIV. Nuestro luminoso restaurante con terraza está situado en el primer piso del hotel y está abierto diario para el desayuno. Un rico desayuno - bufete se sirve desde 7AM hasta 10AM.
Exterior
Las primeras referencias conocidas a este maravilloso hotel datan del año 1307. Desgraciadamente, informaciones más antiguas se perdieron en un incendio. Originalmente el edificio era denominado "León Blanco", y fue conocido como un refugio de viajeros que quedaban detrás de la puerta de la ciudad conocida hoy en día como la Torre de la Pólvora. Cuando las puertas se cerraban al anochecer, "León Blanco" fue un lugar popular donde pasar la noche. En el siglo XVII, el hijo de la emperatriz María Teresa que más tarde llegó a ser el emperador José II, pasó una noche en el "León Blanco", y en su honor el nombre de esta casa encantadora fue cambiada en "La Ciudad de Viena".